Los tiempos han cambiado y estamos en constante evolución. A veces pienso que en la tapa de infantil se dan demasiados contenidos a los niños y que nos olvidamos de algo muy importante: la manipulación, el descubrimiento y el juego. ¿Es realmente necesario hacer fichas en educación infantil? ¿Son las dichas la única herramienta de aprendizaje en las aulas de los más pequeños?
Hoy en día hay infinidad de recursos para poder utilizar en la aulas de infantil sin tener que recurrir a las fichas. ¿No creéis que es ya tiempo de observar y dejar paso a nuevas pedagogías más inspiradoras? Seguro que si buscamos un poquito más en nuestra intuición educativa, seguro que ella nos dará muchas pistas para abordar nuevas propuestas llenas de creatividad. Aquí os dejo mis 5 motivos para no hacer fichas en educación infantil.
El cerebro del niño en la etapa infantil entre los 2-6 años no tiene necesidad de hacer fichas
En esa etapa si investigamos un poquito sobre el cerebro del niño comprenderemos que en esta etapa lo que más necesita es movimiento para poder a su vez desarrollar la comunicación humana. Estar sentados todos al mismo tiempo y todos haciendo lo mismo, es dar lugar a una gran sensación de vacío, de no hay nada por descubrir ya que todos estamos haciendo lo mismo.
La creatividad es la inteligencia divirtiéndose- Albert Einstein
Las fichas en educación infantil no respetan la individualidad del niño
Está claro que no todos podemos alimentarnos de la misma manera. Y que a todos no nos gusta el mismo tipo de ropa o de música. De esta manera, deberíamos entender que no todos los niños son capaces de asimilar y entender los mismos conceptos que le intentamos introducir con las fichas. Ya María Montessori habla de los periodos sensibles en la etapa infantil.
No estamos favoreciendo el juego que es tan importante en la etapa infantil
Cuando un niño esta sentado frente a una ficha esta ficha son imágenes estereotipadas. Los objetos reales que vemos a diario son tridimensionales no bidimensionales como aparecen el plano de la ficha , el plano del papel. Así caemos en la cuenta de que no es un acto vacío de beneficio personal sino que es un mecanismo de desarrollo cognitivo social, y físico para el niño y la niña.
Tenemos que tener en cuenta que todos los contenido deben ser tangibles
Es decir que se puedan manipular, experimentar u observar. De esta manera, le estaremos dando importancia a la percepción con todos los sentidos que podamos: tacto, gusto, visto y oído. Así estaríamos viendo todas las variantes que nos ofrece ese objeto o elemento del que queremos que el niño aprenda las propiedades. Por ejemplo, si queremos que el niño aprenda que una pelota es redonda, ¿no sería mejor que jugara y experimentada con ella en vez de hacerle pintar o dibujar una?
Dímelo y lo oiré. Enséñamelo y lo veré. Involucrarme en ello y lo aprenderé- Confucio
Cada niño aprende de manera diferente y tiene un ritmo distinto
Ningún niño es igual a otro y es necesario tener en cuenta sus capacidades de aprendizaje. No se trata de cómo nos gusta enseñar sino de como al cerebro le gusta aprender. Porque lo importante no es lo que aprende sino el como se descubre. Todos recordamos mucho mejor cuando el aprendizaje ha sido fruto de la exploración personal que cuando ha sido una simple acumulación de conocimientos trasmitidos desde fuera.
Ademas para aprender es necesario la atención y esto solo es posible si el circuito de la motivación esta activo. Prestamos atención y recordamos aquello que es singular, sorprendente e interesante.
¿Vosotros qué opináis de las fichas en educación infantil? ¿Creéis que es un recurso de aprendizaje necesario o que hay más formas de aprender?